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Lacuna Shifts es una experiencia de realidad virtual espacio-poética, una sala volátil en perpetuo cambio con respecto a su visitante, mutando en tamaño y en sus elementos arquitectónicos y, a la vez, revelando trazos de narrativas poéticas.
Libremente inspirado en los libros de Alicia de Lewis Carroll, Lacuna Shifts combina sonidos, textos e imágenes para crear una realidad surrealista y alternativa. La mirada del visitante, incorpórea, se convierte en el único instrumento con el que se puede conectar con este espacio: deja rastros y activa y construye estructuras. En vez de viajar por el mundo, el mundo se mueve en torno al espectador, a veces de manera furtiva, a sus espaldas, otras a plena vista. La arquitectura de Lacuna rechaza su rol pasivo, el de un refugio inmutable y seguro, y permite la experiencia, físicamente imposible, de un espacio poético y de una reflexión sobre la delicada relación que el espectador mantiene con su entorno.
Debido a la naturaleza procesal de Lacuna Shifts, no podrás entrar dos veces en la misma habitación. Cada visitante vivirá un “viaje” distinto, que se manifestará de distintas formas en función del comportamiento de aquel y del propio carácter errático del mundo. De forma similar a los nuevos simuladores de paseo y los juegos narrativos de exploración, el espacio virtual se transforma en un mundo paralelo, misterioso e imprevisible, en algo a medio camino entre una percepción espacial engañosa, una alucinación acústica y un críptico juego de palabras.
DEPART son Leonhard Lass y Gregor Ladenhauf. Su objetivo principal es la creación de obras audiovisuales, poéticas e inmersivas. Firmemente arraizados en lo digital, exploran el carácter ritualístico de los algoritmos y se adentran de forma deliberada en lo misterioso para elaborar momentos únicos marcados por su rigor formal y su intensidad estética.
DEPART siguen la tradición poética: pretenden subvertir el lenguaje. No hablamos de lenguajes literales basados en la palabra, sino de lenguajes como sistemas simbólicos en general, lo que incluye sonidos, imágenes, algoritmos, gestos, objetos, etc. A través de una manipulación sutil de sus gramáticas, cortocircuitos intencionados de sus redes de referencia y ligeros cambios de perspectiva, pretenden provocar avalanchas internas en la consciencia. Como modus operandi, utilizan procesos generativos y simulaciones en tiempo real para construir “mundos creíbles” y herméticos, efímeros entornos de pruebas de sincronicidades al borde del surrealismo que evocan una inmanencia virtual. Adoran las sorpresas.