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#ALPHALOOP es un proyecto implementado por el artista Adelin Schweitzer, que aborda el tema de lo sagrado a través del prisma de la práctica imaginaria del tecnochamanismo, afirmando que la naturaleza y la tecnología no son dos polos opuestos, que no hay una diferencia estructural entre los ordenadores y otras manifestaciones “naturales” de la realidad. Partiendo del postulado de que no existe una única realidad, sino un conjunto de paradigmas que condicionan nuestra percepción de la realidad y definen nuestra relación con el mundo, ALPHALOOP cuestiona este condicionamiento apropiándose del uso “tradicional” del teléfono móvil por medio de un experimento participativo, inmersivo y ambulante. El teléfono como prótesis de la comunicación aquí se convierte en un órgano de visión y audición, sustituyendo la percepción de los participantes. El espacio público se transforma en escenario de un ritual muy extraño que transporta a los espectadores al otro lado del espejo.
El proyecto es fruto de una colaboración con el escritor e intérprete Fred Sechet y el artista y programador NAO. Está libremente inspirado en las teorías de Timothy Leary sobre el chamanismo cibernético, y surge tras una fase de investigación en torno a los mitos y las culturas autóctonas del norte de Quebec, que nutren de dramatismo los textos de esta performance transmedia interactiva prevista para 2019.
Para acceder a #ALPHALOOP es necesario adquirir la modalidad de entrada: REALIDAD VIRTUAL – ARCHIVO – #ALPHALOOP, escogiendo en el momento de la compra el día y la franja horaria concreta en la que se desea realizar la actividad, dentro de las posibilidades que se ofrecen.
Adelin Schweitzer nació en 1978 y vive y trabaja en Marsella. En 2004 se graduó en la Escuela de Arte de Aix-en-Provence, comenzando así una polimórfica carrera como artista a medio camino entre la performance inmersiva, los experimentos audiovisuales y las nuevas tecnologías. Adelin forma parte de una nueva vanguardia artística junto a Rimini Protokoll, Tinguely, Marc Pauline de S.R.L o Stelarc. Partiendo de la ciencia-ficción y las ciencias cognitivas, el artista va dictando los esquemas de un universo singular y avanzado. Desde 2014, el artista se asocia con Deletere, un estudio multimedia con sede en Marsella en el que sigue investigando la deceleración tecnológica y el tecnochamanismo por medio de proyectos in situ dentro del grupo Drone Bastard, usando espacios públicos como un patio de recreo para realizar performances multimedia participativas con robots.